Viviendo la experiencia de emprender de nuevo

Si pudiéramos describir el momento en el que estamos actualmente en Bellelli, sería algo similar a: un volver a emprender, con todas las emociones que eso implica. Es un camino complejo, pero vale cada momento, porque creemos en nuestro propósito de construir una experiencia de aprendizaje más humanizada.

Hace 9 años que iniciamos Bellelli, éramos un Kinder muy raro y diferente para muchos, nos dijeron: hippies, chancletudas, intelectuales hipsters, que nuestros niños solo jugaban sin disciplina y no aprendían nada. Estos comentarios venían principalmente de personas e instituciones con ideologías y visiones muy diferentes. Por esta razón nos dimos a la tarea de abrir las puertas de Bellelli para compartir lo que estábamos viviendo, cómo lo hacíamos pero principalmente el por qué creíamos en este enfoque de aprendizaje y en esta filosofía de vida. Pasó un tiempo corto y las historias de los niños, niñas, familias y maestras fueron siendo testimonio de que era posible, deseable y necesaria una experiencia educativa como Bellelli.

Agradecemos a esas primeras familias, aliados, soñadores, transformadores, disruptores que se unieron a esta comunidad. Muchas de ellas siguen con nosotros, nos hacen crecer continuamente porque mantenemos una comunicación honesta y porque cuidan la esencia de quienes somos. Fue interesante que una gran mayoría de esas primeras familias eran internacionales, con una visión muy respetuosa de la infancia, de más autonomía y coherente con las capacidades y necesidades de las infancias de hoy.

Con la apertura de la Primaria, en media pandemia, dimos otro salto de esperanza y lucha, porque nuestros niños, niñas, familias y equipo tenían derecho a una experiencia de aprendizaje respetuosa, a una comunidad como lo que somos. Fuimos enfáticas que nuestra prioridad (luego de una pandemia) sería la salud mental y buscar las mejores experiencias para los niños y niñas.

En la actualidad, como fue con el Preescolar, estamos generando un nuevo movimiento de energías/visiones o disrupción y eso incomoda a algunos. Es bueno que se dé este invitar a cuestionar (nos/se) brindar nuevas alternativas, pero también a acompañar y abrir de nuevo las puertas para visibilizar los que bellelliamos todos los días.

Volviendo al inicio, nos sentimos de nuevo en ese etapa de emprender, con esas miradas ilusionadas de unos y de miedo de otros.  Eso sí, nos sentimos con aún más fuerza esta vez, porque ya no somos solamente las y los que iniciamos hace 9 años, ahora somos una comunidad de más de 180 niños y niñas, más de 50 personas del equipo, muchas familias y semillitas en muchos otros lugares que dicen sí se puede una educación más humanizada para crear una sociedad de bienestar.

-Carolina García, Directora General Bellelli